¡Descarga Ped1 comunicación oral y escrita i y más Ejercicios en PDF de Filología solo en Docsity! Primera Prueba de Evaluación a Distancia Comunicación Oral y Escrita en Español I 2013-2014 1. ¿Cree que el término castellano puede hacer referencia a una lengua y a un dialecto? ¿Y el término español? Justifique su respuesta. Extensión máxima una página. (2.5 puntos) El término castellano hace referencia tanto a la lengua como al dialecto, mientras que el término español hace referencia solamente a la lengua. Para ver con mayor claridad la diferencia entre ambas voces, profundizaremos en sus definiciones proporcionadas por el Nuevo diccionario de dudas y dificultades de Manuel Seco y por el Diccionario panhispánico de dudas de la RAE. Según la definición de castellano, esta denominación hace referencia, originalmente, al dialecto románico que surgió en el Reino de Castilla durante la Edad Media, y que actualmente constituye una variedad del español en dicha región. El devenir histórico determinó que dicho dialecto se extendiera primero por la península Ibérica y después por América. Asimismo el uso del término castellano para designar la lengua española por las instituciones académicas –la propia Real Academia Española lo empleó hasta 1925-, lo convirtieron en sinónimo de español. Además, hemos de tener en cuenta que, incluyendo en este caso consideraciones políticas, el término castellano puede emplearse, con más propiedad, cuando hacemos referencia a la lengua común de España en aquellas comunidades autónomas con lengua propia. En cambio el término español designa de modo unívoco la lengua común de España y de las regiones hispanoamericanas. Se trata además de un término que goza el refrendo internacional, por lo que es preferible su uso frente al de castellano cuando nos estamos refiriendo a la lengua española. En ningún caso podremos usar el término español para hacer referencia a un dialecto, puesto que no existe tal. Grado en Lengua y Literatura Españolas PAGE 3 2. Siguiendo el capítulo 1 de A. Briz, Saber hablar, por un lado, y las páginas 82-84 del libro Introducción a la lengua española, por otro, comente y ejemplifique en qué consiste hablar bien. Extensión máxima una página. (2.5 puntos) Hablar bien supone tanto el conocimiento preciso de la intención comunicativa y de la situación en la que se desarrolla la comunicación como el aprendizaje del uso correcto de la lengua. Y, por supuesto, saber combinar ambos conocimientos para emitir un discurso coherente y adaptado a la situación de que se trate. Respecto a la intención comunicativa y la situación, el emisor de un mensaje hablado debe conocer no sólo las características de los interlocutores, la relación que se mantiene con ellos, el lugar, espacio y tiempo en que se desarrolla dicha comunicación sino también qué es lo que pretende con ella, cuál es la finalidad, y por tanto debe adaptar el mensaje a dicha intencionalidad y situación. A modo de ejemplo, si acudimos a la consulta de un médico por un problema de sobrepeso, la situación comunicativa no permite que el doctor nos hable en un registro vulgar y familiar, utilizando expresiones como: «colega estás gordo», «te va a dar un yuyu»; ya que ello le restará credibilidad, y el objetivo de la comunicación – que el médico nos conciencie sobre nuestro problema y nos dé soluciones no se alcanzará; al contrario, debe emplear un registro formal y adaptar el lenguaje empleado a la situación comunicativa: «tiene usted sobrepeso y eso le puede generar problemas coronarios» . Una situación contraria a la descrita, en la que se use un registro demasiado formal o incluso científico en una situación comunicativa informal, como una conversación de amigos explicando nuestra visita al médico, puede convertirnos en motivo de mofa, y los amigos en lugar de quedarse con el mensaje que les estamos transmitiendo, harán hincapié en nuestro tono pedante. El aprendizaje del uso correcto de la lengua es fundamental para poder transmitir los mensajes: la enseñanza de la sintaxis adecuada, la riqueza y amplitud del léxico, la pronunciación adecuada, todos ellos son rasgos de un conocimiento extenso del propio idioma que nos permitirán adaptar nuestro discurso a la situación comunicativa. Sin esos conocimientos no podremos expresarnos correctamente, y por tanto, por mucho que pretendamos adaptarnos a la situación comunicativa no podremos. En el momento en que hablamos debemos integrar ambos conocimientos. Grado en Lengua y Literatura Españolas PAGE 3