Evidencias Empíricas de la Evolución
En esta clase, se van a explicar algunos conceptos, algunos ejemplos de evidencias que soportan la teoría de la evolución descrita por Charles Darwin, ya que cuando él describió su teoría solamente se conocían algunos aspectos que digamos que evidenciaban la existencia o que soportaba la asistencia de la evolución.
Entonces, a día de hoy existen muchas evidencias mediante las cuales ya sabemos que la evolución es más que una teoría, está mucho más cercana a ser un hecho totalmente probado que una teoría.
Por lo tanto, vamos a describir estas evidencias que se han ido encontrando a lo largo del tiempo.
A modo general, enumerando estas evidencias que vamos a intentar explicar una una, pues existen caracteres anatómicos, estructuras sobre todo homólogas mediante las cuales los científicos han ido desarrollando lo que llamamos árboles filogenéticos.
Estas evidencias digamos que son las evidencias sobre las que construyó su teoría Darwin y a día de hoy el conocimiento que tenemos sobre ellas es mucho mayor que el que tenía Darwin en su momento, en su época.
El desarrollo de la biología molecular, sobre todo todo el desarrollo relativo a la tecnología del ADN sobre todo la manipulación del ADN y el desarrollo de la técnica de la PCR o reacción en cadena de la polimerasa, pues fue un avance fundamental para poder comparar el ADN, la dotación genética de las diferentes especies y poder refinar o mejorar el posicionamiento de los árboles filogenéticos para poder entender mejor cómo estaban distribuidas las especies y a partir de qué ancestros habían evolucionado.
La biogeografía o el estudio de los elementos geográficos en relación a la evolución es algo en lo que también Darwin se fijó, pero que a día de hoy tenemos un conocimiento mucho más extenso de los orígenes y de la importancia que tienen estos factores para poder explicar todos los eventos evolutivos.
Los fósiles, ya que Darwin a pesar de haberse fijado también la existencia de fósiles, no se disponían de tantas colecciones como existen a día de hoy y de tantos estudios, no sólo a nivel observacional sino también a nivel científico con estudios físicos que permiten datar con química y con estudios moleculares, los fósiles en diferentes épocas y poder de ese modo tener un conocimiento más preciso de la época en la que surgieron las diferentes especies presentes en los registros.
Y para finalizar, algo también muy importante los eventos conocidos como microevolución o evoluciones que han sucedido en pequeñas poblaciones, las cuales hemos podido observar de principio a fin, es decir, son procesos evolutivos que se han dado de forma abrupta y que podemos describirlos de su principio a su fin por lo tanto, son evidencias directas de que la evolución está existiendo y actuando a todos los niveles a día de hoy.
En primer lugar, la anatomía y la embriología, que son dos conceptos en los que ya se fijó Charles Darwin cuando formuló su teoría de la evolución, estudian básicamente las características fenotípicas, las características fisiológicas de los animales y las plantas, por supuesto, ya que presentan en algunas ocasiones características homólogas.
Lo que quiere decir que presentan órganos similares pero
que se ve que han divergido o han evolucionado mediante una, lo que se conoce como una evolución divergente para adaptarse a diferentes nichos pero que provienen de un antepasado común.
Estos árboles evolutivos que, como el que puede se puede observar aquí en la parte inferior, son un ejemplo de árboles que se pueden generar y que se han generado durante toda la historia de la biología de la evolución a partir del estudio de estas características homólogas.
También se han estudiado muchas estructuras conocidas como vestigiales o estructuras que en una determinada especie ya no cumplen la función que cumplían en sus ancestros pero que aún existen porque están, digamos, en regresión.
Este sería el caso del coxis en humanos que sería un vestigio de lo que queda de la presencia del rabo que tendrían nuestros antepasados primates.
Cabe decir que muchas de las características anatómicas no se pueden ver a simple vista sino que tenemos que ir a nivel embriológico para poder detectar esos cambios y esas nuevas apariciones anatómicas que pueden ayudar a explicar y a confeccionar estos árboles.
Como punto fundamental de mejora de la comprensión de la teoría de la evolución que en su momento Darwin no conocía, es todos los avances relativos a la biología molecular.
A día de hoy se conocen muchas evidencias basadas en el conocimiento de la biología molecular que aprueban y soportan la teoría de la evolución a la perfección.
Para empezar, todos los seres vivos conocidos comparten el mismo material genético, es decir, todos los seres vivos se sustentan a base de ADN.
Esto ya es una prueba fundamental de que tiene que existir un antepasado común para todos nosotros.
Además de esto, existe un código genético universal, lo cual quiere decir que el sistema de tripletes o de codones en el ADN los cuales cada uno de ellos codifica para la generación de un aminoácido, quiere decir que si este código es universal, si este código se lee de la misma forma en todos los organismos existentes, tiene por lo tanto que existir o es una evidencia que soporta también la existencia de un antepasado común.
Además de esto, los mecanismos del ADN para transcribirse, es decir, para pasar de ADN a ARN mensajero y para que ese ARN mensajero se traduzca, son similares en todos los seres vivos.
Por lo tanto, esto también apunta hacia un origen común, es decir, todos los organismos provienen de un antepasado común que desarrolló esos mecanismos de transcripción y de traducción del material genético.
Además de esto, otra evidencia aportada por la biología molecular es que todos los organismos contienen o son formados por las mismas piezas fundamentales o los mismos aminoácidos.
Además, el estudio genético de las diferentes especies para formar los árboles filogenéticos que conocemos a día de hoy ponen en evidencia la existencia de genes homólogos que podemos perfectamente trazear, podemos buscar el antepasado de todos los genes que tiene cada uno de los individuos o especies existentes para ver cómo han ido evolucionando esos genes a lo largo del tiempo y trazar incluso lo que se denominan como relojes moleculares, ya que tras conocer la tasa de mutación de un gen en concreto, podemos saber cuánto tiempo ha tardado en evolucionar y, por lo tanto calcular, digamos, el tiempo que ha pasado desde la divergencia original de esos dos genes.
La biogeografía utiliza a través del estudio de los elementos geográficos en comparación con diferentes especies y diferentes poblaciones y la forma en la que estas han evolucionado, conforman un estudio y una evidencia muy potente que también está a favor de la teoría de la evolución.
La primera de estas evidencias es que existen grandes grupos de especies que divergieron de forma primitiva, es decir que se formaron hace muchos años cuando aún existía un continente único llamado Pangea.
En estos grupos primitivos coincide que su distribución geográfica es muy amplia y coincide con la división original que en la que se fragmentó el gran continente Pangea.
Es decir, la distribución que adquirieron los continentes después de la fragmentación de Pangea coincide también con la distribución de estos grandes grupos primitivos cuando aún existía, digamos, este gran continente Pangea unido.
Sin embargo, los grupos que se formaron evolutivamente de una forma más moderna tienen distribuciones más locales.
Un ejemplo de esto sería por ejemplo, especies únicas formadas en algunas islas como las especies australianas de mamíferos, las cuales todas ellas son marsupiales, pertenecen al grupo de los marsupiales.
Esto quiere decir que la especie se generó allí y evolucionó allí por divergencia evolutiva y por un aislamiento.
Además de esto, la biogeografía nos aporta, como comenté anteriormente, un registro fósil según el cual también se pueden estudiar posicionalmente en el globo las diferentes especies antepasadas, compararlas con las especies existentes hoy en dia y ver efectivamente que existe una progresión en la evolución que vemos en las especies existentes hoy en día, a pesar de que el registro fósil, como ya se conoce, es incompleto.
Y para finalizar un proceso que es muy interesante y que es de los más evidentes, que soportan la existencia de la evolución son los procesos llamados de microevolución.
Estos procesos son procesos que digamos en los cuales hemos podido ver procesos evolutivos en directo porque son procesos que se han generado de forma muy rápida.
El primero de ellos ha sido el surgimiento de bacterias multirresistentes por el uso indiscriminado de antibióticos, especialmente en ambientes hospitalarios.
Esto quiere decir que se ha generado una variabilidad en la genética de las bacterias, han adquirido resistencias a antibióticos y, debido a una presión selectiva artificial generada por el uso indiscriminado de los mismos, hemos visto cómo la selección natural, en este caso en cierto modo artificial, ha generado o ha seleccionado estas especies multirresistentes.
Otro ejemplo también muy típico sería el de los mosquitos y la administración de los pesticidas conocidos como DTTs.
Esto, la administración de DTTs para mermar las poblaciones de mosquitos, especialmente los mosquitos que transmiten la malaria ha hecho que se generen variedades de mosquitos resistentes y que a día de hoy haya muchas poblaciones de mosquitos ya resistentes al DTT.
Por lo tanto, estamos viendo un mecanismo en directo de evolución y como caso probablemente más típico o más estudiado en las universidades es el caso de la polilla moteada.
La polilla moteada que podemos observar aquí en estas fotografías a la derecha, fue originalmente, las poblaciones contenían la mayor parte de individuos blancos o con tonos más claros.
¿Qué ocurrió?.
Que tras la Revolución Industrial pasamos de un contexto en el cual las polillas blancas se camuflaban muy bien en las cortezas de los árboles, sin embargo, tras las grandes emisiones de humos procedentes de la Revolución Industrial, las cortezas de los árboles se tiñeron de unos tonos más oscuros y se vieron favorecidas la selección de individuos cada vez más oscuros.
Por lo tanto, a día de hoy o después de la Revolución Industrial, se observó que había una mayor cantidad o una mayor proporción de polillas oscuras o negras que blancas.
Esto fue un proceso que mostró de una forma directa como los procesos de evolución pueden desplazar a una población en concreto, a un fenotipo por otro, por cambios ambientales que favorecen el fitness de unos individuos en concreto.