Sucesión Ecológica
En este tema se profundizará en determinados conceptos que van a ayudar a entender lo que se conoce como sucesión ecológica, que no es más que la deriva o el cambio sucesivo de especies en un territorio en concreto en un ecosistema.
Los ecosistemas, por lo tanto, son elementos que a pesar de que se podrían considerar a simple vista como estancos o como estáticos, son elementos cambiantes, es decir, están en constante cambio.
Esto sucede porque el equilibrio teórico en el que podrían estar estos ecosistemas sucede de forma muy complicada en la realidad.
En la naturaleza no ocurren estos equilibrios debido a que siempre van a existir cambios tanto en el medio ambiente como en los seres vivos que habitan en el mismo, ya sea para adaptarse a estos cambios de medio ambiente o para competir entre ellos.
La sucesión ecológica va a llevar parejo cambios en la cantidad de especies y además, en la distribución de dichas especies.
Un modelo que se estudia normalmente para entender la sucesión ecológica es el conocido como modelo biogeográfico de las islas.
Las islas se suelen considerar laboratorios naturales debido a su pequeño tamaño, ya que es mucho más fácil modelizar y controlar tanto las especies que viven en él como los elementos que ayudan o que condicionan sus vidas, los elementos abióticos.
En las islas se conoce que la cantidad de especies es relativamente constante, pero a pesar de que el número de especies sea constante, los científicos a lo largo de los años han descubierto y han demostrado que la variedad de las especies está sujeta a un cambio continuo, es decir, a pesar de que en las islas haya una cantidad específica de especies, pues.
estas especies, digamos, las especies que conforman ese número limitado de especies, van variando a lo largo del tiempo.
Por lo tanto, se va a suceder un reemplazo continuo de las especies insulares.
La colonización de las islas, que normalmente sucede a partir de los terrenos colindantes continentales, va a depender de dos factores fundamentales: el tamaño de la isla, cuánto más pequeñas sean las islas más inestables van a ser y más fácil va a ser la colonización y la distancia, a menor distancia
mayor probabilidad de que las islas sean colonizadas o que lleguen nuevos individuos de terrenos continentales adyacentes.
Existe una hipótesis también para entender la sucesión ecológica, como van variando las especies en un ecosistema que se conoce como la hipótesis de la perturbación intermedia.
Las perturbaciones son sucesos que ocurren en los ecosistemas en la ecología que digamos, inciden sobre las poblaciones, como por ejemplo incendios, introduciendo nuevas especies, cambios en las especies existentes etcétera.
Estas perturbaciones pueden provocar dispersión de las especies, pueden provocar eventos de recolonización o pueden variar las competencias entre las diferentes especies.
Por lo tanto, estos son elementos que le van a suceder a las especies debido a las perturbaciones.
El hecho de que una perturbación sea intermedia y no muy grande o muy pequeña, está comprobado que mejora tanto el número de especies como la biodiversidad.
Debido a que estas perturbaciones intermedias ayudan a que existan cambios progresivos pero no drásticos y dramáticos en los ecosistemas y poblaciones que existen en la naturaleza.
Los ejemplos, digamos extremos, sería un ecosistema sin ningún tipo de perturbación o con perturbaciones muy pequeñas, y esto promovería que sólo hubiera determinadas especies muy especialistas, es decir, muy bien adaptadas a los nichos que existieran y los hábitats existentes en un determinado sitio pero que esto no variaría, no aumentaría nunca la biodiversidad.
En el lado contrario, si hubiera demasiadas perturbaciones llevarían probablemente a la destrucción del ecosistema.
Por lo tanto, unas perturbaciones intermedias van a ayudar a que exista, digamos, un reemplazo progresivo de las especies existentes por cambios novedosos que ayuden a mejorar o adaptarse cada vez mejor a las circunstancias, recordemos siempre cambiantes.
La conocida como sucesión ecológica es por lo tanto, un cambio en la composición de especies de un territorio dado que viene fundamentalmente motivada por las perturbaciones, idealmente intermedias.
Un ejemplo de estos serían una sucesión típica en un bosque comenzaría por vegetales pequeños arbustivas o incluso herbáceos rastreros de vida corta, que se vería sucedido poco a poco por vegetales más prominentes y de vida larga.
También las sucesiones ecológicas están altamente interconectadas, por lo tanto, los cambios a niveles de la masa vegetal, a nivel de los productores de un ecosistema también promueven cambios en los ecosistemas a nivel animal.
Por lo tanto, todo está altamente relacionado y las sucesiones ecológicas son procesos de alta complejidad que llevan de un suceso llevan a otros múltiples sucesos, digamos, concatenados.
En algunos hábitats muy concretos, de hecho, las sucesiones son parcialmente predecibles para unas condiciones dadas.
Por ejemplo, en determinados climas y altitudes, se conoce con precisión la sucesión ecológica que sucede normalmente con las especies tanto arbustivas como arbóreas que habitan un bosque.
Entonces, como resumen, la sucesión ecológica pasaría por un proceso de maduración, el cual estaría promovido por estas perturbaciones intermedias que incidírían en el medio del proceso para ir seleccionando las diferentes especies y tras un proceso largo de maduración, que sería siempre un proceso direccional, llegaríamos a un estado o fase conocida como clímax en el que en el que todas las especies alcanzarían su mayor grado de desarrollo o maduración.
Aquí en la figura, en la parte inferior podemos ver como un bosque recibe la influencia de un incendio, desaparece total o parcialmente toda la masa arbórea y vegetal y en la viñeta número cinco comenzaría un proceso de sucesión ecológica en el que primeramente el suelo se vería infestado por especies de tipo herbáceo, de tipo rastrero bajo de crecimiento más rápido, que iría siendo sustituida progresivamente por especies de más, de mayor porte de crecimiento más lento y también de una mayor complejidad y mayor maduración a nivel ecológico.
Ya para finalizar este reemplazo de las especies que ocurre en un proceso de maduración, en un proceso de sucesión ecológica, se puede dividir en cuatro tipos fundamentales, que serían los modelos de reemplazo por facilitación, por inhibición, por tolerancia o por colonización aleatoria.
El modelo de reemplazo por facilitación, serían especies que, digamos, preparan el terreno o facilitan la sucesión para otras especies que van a llegar.
El modelo de inhibición sería el modelo contrario, en el que algunas especies dificultan la sucesión, dificultan la aparición de otras especies.
Esto por ejemplo, se conoce qué ocurre con especies de eucalipto que dañan el suelo y impiden que otras especies proliferen.
El modelo de tolerancia en el que ganaría la especie que fuera más tolerante a las condiciones del medio y el modelo de colonización aleatoria, en el que no existirían interacciones importantes entre las especies y simplemente se daría un proceso de colonización de forma estocástica o, como he dicho, aleatoria.